JARDÍN ZOOLÓGICO
Dentro de algunos años sucederá lo siguiente:
Un elefante de dos tres metros de altura pensará para sí:
Yo soy un elefante útil a mí mismo
Mis pantalones respiran felicidad hasta por el marrueco.
Cuesta un poco andar hacia atrás -hacia lo alto
Hacia la imagen de otro elefante más bello que yo
Con el objeto de sufrir un pequeño cargo de conciencia.
Qué sería de un pobre elefante si le arrancáramos los colmillos
Y después le diéramos de golpes en las costillas
Hasta que dejara de existir.

A lo que la mosca responderá:
Hermano elefante, tus palabras nos desconciertan
Mírame a mí rebosante de salud
Marchar entre las hojas entre las flores
Entre las patas de los elefantes
Marchar en busca de otra mosca igual a mí.
Sigue el ejemplo de una mosca que piensa que sueña que sonríe
Y que generalmente hace su nido
En los yacimientos de abonos artificiales.

Este breve diálogo se llevará a efecto dentro de varios años
En un jardín particular dotado de luz eléctrica
En cuya puerta podrá leerse la siguiente inscripción:
"Jardín particular, viernes y sábado de once a doce"
Entonces el elefante despertará de su sueño infernal
Y apoyado en una especie de ataúd exclamará:
Dios protege a los animales

El no permitirá que yo muera
Las moscas suelen creerse perfectas
Ellas vuelan, a veces ellas van de un punto a otro
Mueven sus brazos y piernas a un mismo tiempo.
A lo que la mosca agregará:
Cordero de Dios, estos elefantes se están volviendo locos
Llenan de agua sus trompas que luego lanzan fuera de sí
Ellos corren a velocidades fantásticas
Por esos jardines particulares sin puertas sin ventanas
Como elefantes enfermos llamados a desaparecer.

En este momento sucederá lo siguiente:
Las moscas crecerán hasta adquirir el volumen de un elefante
Y por su parte los elefantes bajarán de peso
Sus imágenes se reducirán una y mil veces
Hasta transformarse en pequeños elefantes de cocina de salón
Ellos serán unos seres diminutos que andarán por todas partes
En las frutas en el azúcar en la sopa
Y las moscas provistas de fuertes colmillos
Se replegarán hacia el extremo oriente.

de Obra gruesa (Santiago, Universitaria, 1969)


 

SISIB y Facultad de Filosofía y Humanidades - Universidad de Chile